Los cambios de estación suelen ir acompañados de modificaciones en nuestros hábitos alimenticios, sea cual sea estos debemos tener cuidado  ya que un déficit de  determinados complementos alimenticios afectan a nuestra salud ocular como se puede ver a continuación:

• Vitamina C: Los efectos oculares y visuales más frecuentes asociados a este déficit son las grandes hemorragias subconjuntivales. También se pueden ver afectadas diferentes estructuras oculares quemosis, epiescleritis, queratitis, opacidades corneales, hemorragias de cámara anterior y sinequias posteriores, a nivel retiniano se pueden dar una amplia variedad de alteraciones exudados maculares, trombosis de vena central de la retina, atrofia óptica o hiperemia de iris e iritis.

• Vitamina E: una baja concentración de esta vitamina puede causar daños en el segmento externo de los fotorreceptores, así como aumentar el número de gránulos de lipofuscina que se acumula en el EPR (epitelio pigmentario de retina). Otro de estas consecuencias es que puede ocasionar Oftalmoplegia externa.

  Por otra parte estudios AREDS (Age-Related Eye Diseade Study), demostraron que enlentece la progresión de las enfermedades asociadas a la Edad, así como la progresión de las cataratas.

• Hierro: su ausencia durante un periodo prolongado de tiempo puede ocasionar daños a nivel cerebral. A nivel visual, bajas concentraciones de Hierro puede disminuir la visión que en ocasiones mejora cuando se ingiere como complemento, no existen daños a mayor nivel.

• Zinc: La córnea contiene un alto contenido de zinc, como el resto de los tejidos, por lo que la mayor parte de las alteraciones afectarán a estas estructuras. Cuando producen un edema corneal puede desembocar en una opacidad corneal.
  Otras alteraciones secundarias a este déficit son la conjuntivitis seca que produce provocar xerosis. También puede causar ceguera nocturna.

• Vitamina A: alteraciones en la dosis de vitamina A además de causar una gran cantidad de alteraciones a nivel sistémico, existe una gran variabilidad a nivel ocular. La más conocida es la ceguera nocturna, a nivel de la AV no se dan alteraciones, mientras que la sensibilidad al contraste esta disminuída y también se altera la visión del color. Las alteraciones también se producen a nivel estructural, y se puede dar ojo seco, papiloedema, se puede alterar la integridad corneal que se acompaña de queratomalacia con una disminución importante de la visión
  En el caso de la vitamina A, no sólo afecta el déficit también afecta el exceso de vitamina, en los niños esto se traduce en conjuntivitis y picor de ojos. En otras ocasiones este exceso se relaciona con un aumento de la presión intracraneal que disminuye la visión, vómitos, nauseas..

• Vitamina B12: Es característico del déficit de esta vitamina, padecer una visión pobre de color bilateral , así como un escotoma centrocecal relacionado con una neuropatía óptica.
• Biotina: causa atrofia óptica , así como debilidad de las pestañas